Por aquellos tiempos, un blog era un referente para comunicar y para dejar constancia de algo.
Hoy en día las redes sociales han hecho mucho más ágil la comunicación... pero muchas veces ha hecho el mensage efímero... se pierde en el tiempo... vamos esta vez a reutilizar las viejas artes para inmortalizar un mensaje de whatsapp y que no se olvide.
Entrando en materia, el mensaje es un escrito de mi amiga Lorena, compañera de grada en Vallekas que como otra mucha gente, sufriendo desde el lado de la sanidad la pandemia del covid-19 se ha sentido impulsada para expresar lo que siente... y de paso regalarnos conocimiento de una profesión no muy conocida... no sólo médicos y enfermeros hay en un hospital.
Y por comodidad vuestra, aquí va la transcripción:
"DETRÅS DE UNA RADIOGRAFiA
Las pruebas diagnósticas son muy solicitadas en nuestra Sanidad. Muchos de nosotros alguna vez nos hemos hecho alguna a lo largo de nuestra corta o larga vida.
Para realizarse una prueba de este tipo, es necesario un aparato indicado para cada prueba y también se necesita un operador de ese aparato que corresponde a la figura de técnico de imagen diagnostica. Yo pertenezco a ese gremio algo desconocido.
Durante el mes de marzo los técnicos de imagen de mi hospital hemos vivido en primera linea la pandemia de covid-19. Nuestro servicio cada día recibía más pacientes, 20, 40, 80, 160, 320....hasta llegar a dedicarnos exclusivamente a "vencer" al coronavirus.
Enseguida nos dimos cuenta, nuestra labor era clave y fundamental para el diagnóstico de la enfermedad, la Rx de tórax. Por este motivo nuestros aparatos de rayos X realizaron, en solo un mes más de 5000 radiografias y 1200 rx portåtil; por lo tanto, los técnicos atendimos a más de 5000 pacientes. Un esfuerzo físico, pero, sobre todo un enorme esfuerzo emocional, cada radiografía realizada suponía uno más en la lista de contagiados por covid-19.
La realización de una radiografía no es hacer la "foto" y ya está, es recibir a un paciente que viene preocupado, angustiado por el resultado de la prueba, preguntarle su nombre, ayudarle a levantarse, a quitarse la ropa, darle instrucciones, tranquilizarle si está nervioso, y sonreír.
Entonces ves la Rx de tórax y ves esa imagen horrible e inolvidable tan característica de coronavirus; miras al paciente, le despides con una amarga sonrisa, y cuando se va, lloras, porque tienes la sensación de haber hecho la "foto" de una muerte anunciada.
Al día siguiente, esos pacientes están en planta, ahora soy yo la que voy a veros con mi equipo de rayos x, volvemos a hablar, vuelvo a darte ánimos, me despido con una sonrisa en mis ojos, miro la radiografía , ha empeorado en 24 horas
Al día siguiente, esos pacientes están en la UCI intubados, hoy no podemos hablar, pero, si puedo darles ánimos , mientras me abro paso entre todos los cables que te rodean.
Al día siguiente, esos pacientes no están, se han ido para siempre. Lloro por dentro y por fuera. Hoy no puedo daros ánimos, pero, puedo recordaros y os aplaudo a las 20.00
Detrás de una radiografía hay una persona, el técnico de radiología.
Gracias a mi familia y amigos por su apoyo y mil gracias a mis compañieros de guerra por humanizar nuestra profesión.
No somos máquinas, somos personas, somos técnicos"
Ya sabéis algo más de este oficio... y sobre todo... algo más de lo que hay dentro de esa gente a la que seguramente por miedo, impaciencia, mil razones... no miréis como se merecen...
Y que menos que despedirnos con la obra de un par de motorcitos que ayuda a Lorena día a día a ir a hacer una radiográfia más.
¡Aupa Lorena, aupa Alba, aupa Pako!
Indy
